Releo a
Kierkegaard y su diario íntimo (hacía 25 años que no abría un libro suyo: cuando pasa tanto tiempo, directamente vuelves a leer el libro por primera vez de nuevo). El pensamiento corto y aforístico puede tener la forma de un boceto o un esbozo pictórico (como el de ese diario) o puede jugar con puro lenguaje poético, en el que cada palabra está cargada de significado (léase Nietzsche). En cualquier caso, los pensamientos cortos y aforismos acaban siendo una forma muy autoritaria de escritura. No admiten réplica ni discusión alguna y solo albergas la
esperanza de que en el siguiente aforismo el escritor afirme justo lo
contrario.
No hay comentarios:
Publicar un comentario