Cuando la autenticidad de uno mismo se viste de intransigencia hacia los demás, la verdad se vuelve una luz cegadora.

viernes, 6 de marzo de 2015

LA IRRUPCIÓN DE CIUDADANOS, ¿EL PARTIDO LIBERAL ESPAÑOL?

      Parece ser que en los últimos meses, un nuevo partido político ha hecho su apertura propia dentro del complejo tablero de ajedrez en el que se está convirtiendo el panorama político español del último año. Basta consultar algún dato. En los últimos tres meses ha liderado los comentarios en twitter, superando a Podemos. Su intención de voto ya está en un 12% y puede convertirse en cuarta fuerza política, suplantando a UPyD, que ha visto perder su propio terreno vertiginosamente ante el ascenso de Rivera. En el ruido mediático, Ciudadanos suena como una nueva voz, la nueva palabra de moda.  
    La falta de entendimento con UPyD por los miedos mutuos de ser deglutados por su adversario, puede crear una auténtica lucha de poder por ese centro político que acabe dando alas a este nuevo partido originariamente surgido en Cataluña. En la medida en que PSOE y PP se desinflan en el centro y Podemos toca techo e inicia su particular desgaste mediático, Ciudadanos parece tocar ahora el cielo.
     No es difícil identificar el perfil del votante del nuevo partido. Ciudadanos representa a esos otros indignados de la sociedad española, supervivientes y no víctimas de la crisis económica, que recelan de las ideas de Podemos, pero que de ningún modo están dispuestos a votar a los partidos tradicionales por el mero miedo al cambio o al populismo. Si consideran a Podemos como visionarios peligrosos y oportunistas políticos, tampoco libran a los partidos mayoritarios, que tildan como inmovilistas, corruptos y con demasiados intereses creados como para promover una auténtica regeneración política.
       Estos votantes potenciales consideran por otra parte que los agentes que han hecho salir de la crisis a la sociedad española han sido los propios individuos y no tanto el partido político en el poder. Como supervivientes, deben relativamente poco a los dos últimos gobiernos y no aceptan meramente políticas basadas en la mera inercia de los acontecimientos. Efectivamente, el PP no ha completado ninguna auténtica reforma administrativa anunciada hace cuatro años ni mucho menos de regeneración o transparencia política, y no ha hecho otra cosa que seguir los dictámenes de la política económica impuesta por Europa: medidas de recorte del estado, ajuste fiscal y flexibilización laboral. El adelgazamiento estatal se ha producido inevitablemente sobre la sanidad y la educación -ámbitos imprescindibles, por otro lado, para mantener altas cotas de desarrollo social-, pero la administración apenas ha sufrido recortes drásticos a excepción de medidas de maquillaje. La reducción de duplicidades, la racionalización de municipios, mancomunidades y diputaciones provinciales son todavía asignaturas pendientes difíciles de ejecutar para partidos que tienen una clientela demasiado amplia que satisfacer y colocar. En el ámbito económico, Ciudadanos está sorprendiendo al presentar medidas bastante técnicas, discutibles o no, que rebasan los discursos globalizadores e imprecisos de izquierda y derecha, pero que pretenden atajar algunas de las consecuencias más negativas de la crisis. 
     En definitiva, Ciudadanos tiene la posibilidad de representar un partido auténticamente liberal que nunca ha conseguido hacerse un hueco en el centro político español, absorbido por PP y PSOE y sus compromisos respectivos. Desde los mismos comienzos de la democracia y tras la disolución de la UCD, siempre ha habido familias liberales en ambos partidos, pero nunca con posibilidades de convertirse en un grupo propio consolidado sin ataduras incómodas: sectores demasiado conservadores o demasiado escorados a la izquierda. Los intentos de promover dichos partidos en los ochenta se saldaron con un estrepitoso fracaso en la época de dominio socialista. Este es quizás su momento histórico ante reformas que una ideología pragmática y sin ataduras del pasado puede ejecutar mejor que nadie.
   
         Pero sin embargo, también hay sombras que pueden enturbiar este horizonte prometedor. Por un lado, Ciudadanos tiene una visión del juego político similar a Podemos y su acertada visión estratégica de pactos, juego mediático y redes sociales. El efecto Podemos se percibe también sobre el centro político, y los votantes desafectos con todos los partidos buscan lo más similar mediáticamente hablando a Pablo Iglesias, pero sin su ideario político. A diferencia del perfil bastante cerrado de UPyD -un partido hecho a antigua usanza, con trasfondo ideológico más definido y con herederos de la vieja guardia-, Ciudadanos está buscando pactos y apoyos con fuerzas políticas y sociales variopintas basándose precisamente en su indefinición ideológica y en un modelo de campaña similar al que lanzó a Obama a la presidencia, trabajando sobre la sociedad civil. Cierto grado de populismo parece ser compañero inseparable de estos nuevos partidos que luchan por el poder, y un pragmático "todo vale" a la hora de pactar permite cerrar acuerdos con formaciones de ideologías muy diversas.      
      En segundo lugar, la corrupción ya ha tocado la formación. El trato que se ha dado desde el partido a la figura de su locutor, Jordi Cañas, replantea hasta qué punto el partido desea ir hasta el final en la lucha contra la corrupción. Efectivamente, Rivera ha tirado de la letra pequeña del programa de transparencia del partido para no tomar medidas drásticas contra él. El hecho de que el fraude fiscal que se investiga no esté vinculado con malversación de fondos públicos (y sea por una actividad privada) no es demasiado consolador para aquellos que desean ver un auténtico panorama de renovación en el cuadro político español.

lunes, 2 de marzo de 2015

IS PHILOSOPHY AN EXAMPLE OF CREATIVE THINKING?

    Last week we started our lessons on epistemology and psychology, and of course one of the topics that we discuss every now and then was creativity. One of the students seemed very upset and shot a challenging question: Is philosophy a truly creative thinking? When you are continuously making reference to other thinkers, how could you dare to call yourself "original"? Why are you paying so much attention to the old philosophers words, when you said before that authority's argument should be critiziced too? I couldn´t reply anything except telling him that he was right in a 90%. 
    We can not say, properly speaking, that philosophical activity is a good example of creative thinking. All the opposite. Philosophy can be highly critical, deep and wise, but not too much original in its first steps. In fact, every serious philosophy scholars would agree with the  quotation of Confuncio, who said: thinking is important, but learning is even more essential. In their own words: 
He who learns but doesn´t think, is lost. But those who think, and never learn, are in great danger.
   This is an inconvenient truth that sometimes is difficult to accept for the First year students of Philosophy. Most of them are attracted to these studies because of its originality and its critical view but soon they realise that they have to put up with this confuncian quotation dressed on socratic arguments. For some of them, this means the end of their studies. For others, it means to accept reluctantly the socratic mayeutics: to be aware of our ignorance as a first step to wisdom. Therefore, silence, and not creativity, is the first step in the learning of philosophy. But the problem is not solved, and after some years of learning we have very little chances to create our own wisdom, to be original. We became experts on critics, we judge the words of others, but we don't create anything new.

     Unfortunately, this vision is quite true, and the fact is that creative genius are scarce in the history of philosophy, but we find lots of wise man. The wise man used to be an expert on lore, life, and old teachings, and he gives us all this wisdom as suggestions for a good life. Wise man were the typical confuncian thinker, the model of Greek philosopher or the medieval scholastic mind.
    The wise man and scholars were substitued by critical thinkers after Descartes. The best example in this long tradition is Kant. He was able to judge critically all the aspects of the philosophy of his time -metaphisics, ethics, epistemology-, and reform it according to the new use of reason in the 18th century. Even when his originality is undoubtly out of question, Kant is not the typical example of the genius, but a scholar with a gifted mind for analysis and new synthesis. What we know about his boring private life and personality doesn't show the typical standards for a creative genius. We could say here that genius personality are in cultural terms more accepted after Romanticism than during the Enlightment.  
However, there are first rate philosophical genius, even in the 20th century. Wittgenstein, Sartre, Russell or Chomsky could be included in this cathegory in one way or another.

    a) All of them had a divergent background. They don't identify themselves with the typical scholar rol (a University teacher), only concerned on philosophy and their career. They are coming from other studies or professional fields. Wittgenstein was an engineer, Chomsky is coming from Linguistics, Sartre was a secondary school teacher and a writer. Their experience out of the philosophy gave them hints and clues that were crucial to explore unknown fields in their time. It is difficult to think the "second Wittgenstein" without the gap in the decade of 1920, or the existentialism in Sartre without the war experience.

   b) They are able to give new and original contributions in very different fields of human Knowledge, not only philosophy. The last philosophical genius who was able to bright equally in different fields was Leibniz. John Stuart Mill or Karl Marx did the same on politics, economy and philosophy and ethics. Even when the new apportations were not so outstanding as before,  Sartre was an outstanding novelist, Russell and Wittgenstein gave important contributions in mathematical logic, and Chomsky did the same on the fields of linguistics and politics.   

c) They are extraordinary involved in the space and time
that were living. Most of them were concerned about justice, education, politics and society, and became  an important reference for the society at his time -no matter if they were wrong or right-. Wittgenstein is an exception on this matter but we couldn't say that his private life was not concerned with an ethical sense of living. Because they were so concerned with this high goals, they were most of times a complete failure for the people who was closer to them.  

d) Their professional career was always something with less importance than their contributions and goals. As other genius, they have the feeling that there is a goal they have to fulfill on their lives. Socratic coherence became something sacred for this people. Wittgenstein refused more than once, their life in Cambridge. Sartre did the same with the Nobel prize.

    Compared to them, we can find another outstanding philosophers (like Husserl, Zubiri, Heidegger, Gadamer, Rorty, Kuhn, Derrida, Bunge), even more important and coherent and with contributions that are as powerful as the others, but without this geniality and creativity. For sure, all of them can share one or two characteristics mentioned above, but not with the same intensity.

    We could add that individual creativity in the XXIth century is far more difficult than before. Even if I had any chances to say something new about "creativity and philosophy" this should be a delusion, and sooner or later I could find a entire monography talking about the same and precise subject we discuss about (Howard Gardner published a few years ago a book about this). Moreover, when we are talking about the work of a philosopher as an individual mind, like Habermas, for instance, we miss the point that "Habermas" is more a cultural trademark than a philosopher, and his books are only possible by hard and well-functioning  teamwork.   So, if someone dares to say that Wittgenstein -the model of creative and original philosopher in the 20th century- is dead, don't think only about his ideas, but on his creativity.