Y por fin llegó el día que uno piensa siempre lejano e imposible. Tras un parto complicado y muchos nervios, tengo un pequeño ser en mi pecho que resulta ser mi hijo Juanito... y la experiencia resultante: lo otro, lo que está más allá del lenguaje, lo mostrado, lo vivido. Reducirlo a palabras es sencillamente imposible, y es una experiencia privada: no se puede compartir si no se tiene. En fin, perdonen que ante tal shock condene mi blog a un tiempo de silencio contemplativo que espero no sea demasiado prolongado...
Tampoco se puede escribir el cariño y la felicitación a los tres de quien os quiere.
ResponderEliminarUn besazo a los tres y toda la suerte del Mundo en esta nueva fase tan importante y apasionante de vuestras vidas.
¡¡¡Nuestra más sincera enhorabuena!!! Que disfruteis de esta experiencia y que seáis muy felices los tres. Félix&Sheila
ResponderEliminarQue lo disfrutes. Gracias por contribuir a la natalidad y así al mantenimiento del sistema que hará que pueda cobrar mi pensión dentro de unos añitos.Y sobre todo, muchas felicidades
ResponderEliminar¡¡Muchas felicidades, Ángel!! :-D
ResponderEliminarGracias a todos por vuestras felicitaciones, cada uno a su modo. Solo una cosa: estoy muerto y llevo cinco días sin dormir. Pero merece la pena (y de paso, mantenemos las pensiones, je je).
ResponderEliminarUn saludo a todos.
Ángel! Soy Marta! Enhorabuena por Juanito! es precioso! Cuando vuelva a Cáceres intentaré verte! Muchas felicidades de nuevo! Disfrútalo. Un besazo profe! :)
ResponderEliminarGracias Marta!! Ya he echado un vistazo a tu blog. Bienvenida a este extraño mundo!!
ResponderEliminarUn beso muy grande, universitaria (qué envidia, snif snif...)
¡Felicidades, Angelillo,
ResponderEliminarpor tu nuevo ángel en la Tierra!
Gracias de nuevo, aunque sea algo tarde!
ResponderEliminarDe casualidad me he topado con tu blog por estos mundos de Dios. Necesitaré días para leerlo entero, tiene mucha miga (y yo no ando muy bien de tiempo últimamente).
ResponderEliminarQué mejor entrada que esta para dejarte un nostálgico saludo y darte mis más sinceras felicitaciones por tu paternidad.
Flor
Me imagino que eres Flor, la amiga de la infancia de mi hermana (eres la única que conozco, y claro que me acuerdo de ti)... Qué pequeña es la web.
ResponderEliminarMuchas gracias por tu comentario y tus felicitaciones.
Un saludo.
No, no soy esa Flor... fuimos compañeros de clase en las Josefinas, hace ya tantísimos años que es normal que no te acuerdes, jeje, yo estaba interna.
ResponderEliminarHe leído gran parte de tu blog y me resulta muy interesante (también el otro).
Saludos.
Ya me acuerdo!! Perdona, ahora sí que he caído, cuando has dicho que eras interna ya te he ubicado del todo! Sí es verdad que han pasado unos pocos de años... bueno, quizás has visto ya que doy clase en el colegio!! Qué curioso todo...
ResponderEliminarOtra vez, un saludo...
Si, he visto que dabas clase en el colegio, la de vueltas que da la vida ¿eh?
ResponderEliminarLlegué a tu blog animada por la curiosidad "filosófica" de mi hijo de tres años, que de una forma muy simple se plantea ¿de dónde vengo yo?. Hacía años que tenía enterradas esas cuestiones, que me atormentaron durante años, y me sorprendo al verle a él intentando comprender. Quiere saber dónde estaba él antes de estar en la tripa o cuándo yo era pequeña y no conocía a su papá y no concibe que antes de él no hubiera nada (e imagino que con el tiempo se preguntará ¿y después qué?), el no existir nada más que aqui y ahora.
Y yo me veo sin respuestas porque tampoco he sido capaz de responderme a esas cuestiones.
Él me ve como una mamá todopoderosa que cuando no se acuerda de cosas de cuando era un "bebé" yo se las cuento y no entiende cómo no puedo saber dónde estaba él antes de estar, porque para él el no estar no tiene sentido... uf.
En fin, que me alegra saber de ti y que ya tienes una nueva lectora.